viernes, 2 de septiembre de 2011

Reflexiones tras la visita del Papa...

Ha quedado claro para unos, entre los que me cuento, que los últimos coletazos de la peste negra más oscura que pudo caer a esta humanidad fue causada por la codicia de un virus, mal llamado, hombre…

Desde que un puñado de estos hombres se dieran cuenta de la enorme fuerza que contenía la Fe y todos sus derivados, sobre todo una Fe no ciega, una Fe que provenía de profundos conocimientos de los cimientos del porqué de la vida, decidieron iniciar la Gran Manipulación o Gran Mentira, Objetivo? Mantener y multiplicar sus prebendas a costa de lo que fuera. Una de ellas era utilizar esa fuerza energética en su propio beneficio.

Ese era su papel. Partiendo de la base de que este mundo es una escuela, se puede decir que hemos tenido profesores de todas clases, de lo mejor, cada uno en su papel.

No me rasgaré las vestiduras por lo tanto criticando sin más a una de las sectas más infectivas de la historia. Sí diré que el poder lo otorga quien no lo tiene y no al revés.

Todos somos cómplices, en mayor o menor grado, de consentimiento por ignorancia, los más, o por interés, cada cual sabrá cuanto y porqué… Pero si rascas un poco…al final se queda en que cada mundo tiene las circunstancias y civilización que forjan a pulso.

Cuando hablo de los últimos coletazos, que son los que aparentemente más fuerza tienen, es porque en su agonía,  aquello que se aferra a no terminar, a permanecer, cuando las conciencias están ya despertando a otro amanecer, ensayan todo su poder de puesta en escena y son apoyados por aquellos que han sido sus aliados más evidentes, dígase cualquier clase de poder, ya que la Iglesia y el Poder siempre fueron una sola cosa...Y cuando no fue así, acabaron con la resistencia con las formas más abjectas, impensables, e imperdonables. Si alguien ha encarnado el mal en todo su esplendor y a vista de todos en nuestro mundo, esta ha sido sin duda la más que corrupta Madre Iglesia.

En ella no meto a aquellos hombres y mujeres, que los he conocido, con profundas convicciones, alineados en esa institución, que incluso tuvieron casi insuperables dificultades para realizar su labor a costa de enormes sufrimientos y hasta de su propia vida.

Conocí a dos en particular, el padre Alejandro y el padre Ferrán, dos seres que influyeron en mi formación, no la religiosa que nunca la quise, apenas si estoy bautizada y se me respetó en casa que no quisiera hacer la comunión.  Sin embargo, su sola presencia, su labor, su bondad, su entrega, en definitiva su amor al prójimo fue una inspiración ejemplar. De igual modo hubieran sido de no haber estado afiliados, simplemente ellos eran y siguieron siendo así.

Por lo tanto, diré que todos esos movimientos de jóvenes buscando consuelo de un padre, es legítimo. Su juventud y por lo tanto fácil influenciabilidad, tan sólo es aprovechada por los que saben muy bien cómo capitalizar esa energía. Llevan eones haciéndolo.

Qué sigan a Jesús, o mejor dicho, sus enseñanzas por libre, que le busquen sin necesidad de intermediarios, es lo peor para esta institución. ¿De donde sacarían la base para mantenerse donde están?…y... ¿donde están?…Sin duda tambaleándose en este momento de la historia encima de su propio cadáver.

Da igual que haya miles de jóvenes venidos…o traídos de todos lados, siguen manipulando la inocencia de una verdad. La necesidad de todo ser humano de encontrar respuestas, consuelo, apoyo, donde quiera que se lo puedan dar. 

La diferencia de este momento con otras épocas es que el dicho que salió del que sí vino a traer todo eso…respuestas, consuelo, apoyo y tantas otras cosas más…está hoy en día más vivo que nunca…”Por sus frutos los reconoceréis” y sí, se puede engañar a mucha gente durante un tiempo, pero el ser humano de este planeta está cada vez más despierto, al menos una cantidad suficiente de ellos para que también sean una inmensa fuerza a tener en cuenta. Ya han puesto en jaque un modo de funcionamiento que se ha mostrado evidente que no sirve al mundo para vivir, ni siquiera sobrevivir, tal como debe ser entendida la vida.

El sistema que se extendió para mantener la humanidad de un planeta en la ignorancia y aplastados ya no tiene sentido porque el hombre ha crecido en conciencia. Una enorme cantidad de seres humanos están despertando y ven que el sistema socio/político/económico y religioso no tiene cabida, está completamente caduco. Y no tan sólo para la supervivencia del ser humano, sino simplemente porque en nuestras mentes no tiene ningún sentido que tanta riqueza de toda clase
 tenga que ser gestionada bajo formas que tan sólo consiguen mantener el sistema  que las hace escasear para tantos y fructificar para tan pocos.

Lo que hay y ha habido, la riqueza de toda clase, sigue estando donde estaba, la tierra sigue dando frutos, la gente queriendo crecer y prosperar en cuerpo y alma, no escasea nada. Creer o que nos quieran hacer creer lo contrario tan sólo es una ilusión para mantener situaciones de privilegio que carecen de sentido… Y todo está religado porque a través de la Religión…que viene de re-ligare, o sea, unir, se unieron conceptos que nos han esclavizado. Por lo tanto, al contrario de lo que dice Ratzinguer;  …buscad…buscad, busquemos sin descanso dentro de nosotros, sed, seamos libres  de interpretar, de equivocarnos, de acertar, porque será lo único que nos llevará a un mundo que no se parezca en nada a este.

No esperemos que sea el tiempo, el clima,  el cosmos, los seres de otros mundos los que vengan a sacarnos las castañas del fuego, tenemos que encontrar nuestra propia verdad y si la buscamos la encontraremos porque jamás estuvo más lejos que dentro de cada uno.

Todos sabemos que este es el tiempo de ponernos a bucear en nuestro interior, quien más quien menos, lo siente, lo palpa, lo intuye, todos sentimos que estamos en tiempo de examen, que una crisis más grande que en cualquier otra época se nos ha echado encima y la forma de resolverla es distinta de cualquier otra en cualquier otra época. Es una batalla con el alma de cada uno, aprender donde estamos, quienes somos y qué estamos dispuestos a hacer para vivir en un mundo que todos soñamos pero que pocos nos atrevemos a creer en él…Y ese es el primer paso….Por lo tanto yo digo:

Busca dentro de ti a tu trozo de dios y deja que el dios que otros te han hecho temer…pase a mejor vida!

Os dejo más abajo la carta que se supone que Lincoln escribió a la Nación, no sé si ésta la llegó a leer, lo dudo, pero esto nos indica que siempre hubo hombres preclaros que supieron leer en la historia sin condicionamientos. Estos son los peligrosos, los no manipulables, los que ellos se cargaron sin piedad  y cualquier forma de fanatismo, de sectarismo, por más cantidad de seres que aglutine, no lo hace más verdad, tan sólo más peligroso…sobre todo…para sí mismos.

Un abrazo muy fuerte a todos

Enri
                   Carta  de Abraham Lincoln a la Nación
El hombre no debe preocuparse de cuando él morirá, con tal que muera en su puesto de honor y deber. Pero yo puedo agregar hoy, que yo tengo el presentimiento que moriré a través de la mano de un asesino.
El papa y los Jesuitas, con su infernal Inquisición, son los únicos poderes organizados en el mundo que tienen como recurso la daga del asesino, para asesinar a quienes ellos no pueden conquistar con la espada o convencer con sus argumentos. "Desgraciadamente, yo siento mas y mas cada día, que no es en contra de los americanos del Sur, solamente, contra quienes yo estoy luchando, es más en contra del Papa de Roma, sus pérfidos Jesuitas y sus ciegos y sanguinarios esclavos.
Mientras que ellos piensen que pueden conquistar el Norte, ellos no me mataran; pero el día que nosotros derrotemos sus ejércitos, capturemos sus ciudades y los obliguemos a someter, entonces, es mi impresión que los Jesuitas quienes son los principales gobernantes el Sur harán lo que ellos casi invariablemente han hecho en el pasado. La daga o la pistola hará lo que las fuertes manos de los guerreros no pudieron lograr.
Esta guerra civil no parece ser nada más que un asunto político para aquéllos que no saben, yo hago, las secretas primaveras de este drama terrible. Pero es más una guerra religiosa que una guerra civil. Es Roma la que quiere gobernar y degradar el Norte, así como ha gobernado y ha degradado el Sur, desde el mismo día de su descubrimiento.
Son pocos los líderes del sur que no están bajo la influencia de los Jesuitas, a través de sus esposas, relaciones familiares y sus amigos varios miembros de la familia de Jeff Davis pertenecen a la Iglesia de Roma.
Aun los Ministros Protestantes están bajo la influencia de los Jesuitas, sin sospecharlo. Espera su triunfo en el Norte; como lo ha hecho en el Sur, Roma está haciendo aquí lo que ha hecho en México, y en todas las Repúblicas de América del Sur; ella está paralizando, por medio de la guerra civil, los brazos de los soldados de la libertad. Ella divide nuestra nación para debilitarla, dominarla y luego gobernarla.
Pero es muy cierto que si el pueblo americano supiera lo que yo se, del odio feroz de los sacerdotes de Roma, contra nuestras instituciones, nuestras escuelas, nuestros más sagrados derechos, y nuestras amadas y atesoradas libertades, ellos los echarían de entre nosotros o los ejecutarían como traidores.
La historia de éstos últimos mil años nos nuestra que dondequiera que la Iglesia de Roma se encuentre ha sido una daga para herir el pecho de una nación libre, ella es una piedra a su cuello para paralizarla, y prevenir su adelanto por los caminos de la civilización, ciencia, inteligencia, felicidad y libertad.
"Esta guerra nunca habría sido posible sin la influencia siniestra de los Jesuitas. Nosotros se lo debemos al papado, el hecho que ahora nosotros vemos nuestra tierra enrojecida con la sangre de sus hijos más nobles.
Aunque había grandes diferencias de opinión entre el Sur y el Norte sobre el problema de la esclavitud, ni Jeff Davis, ni cualquiera de los líderes de la Confederación se habrían atrevido a atacar el Norte, sino fuese por haber confiado en las promesas de los Jesuitas. Fueron prometidos bajo la máscara de la Democracia que el dinero y las armas de los Católico Romanos y las armas de Francia estaban a su disposición, si ellos nos atacaban. Yo tengo lástima por los sacerdotes, los obispos y monjes de Roma en los Estados Unidos, cuando el pueblo comprenda que ellos son, en gran parte, responsables de las lágrimas y el derramamiento de la sangre en esta guerra.
Yo oculto del conocimiento público de la nación, lo que yo sé, sobre este tema, porque si el pueblo supieran toda la verdad, esta guerra se convertiría en una guerra religiosa, y en seguida, tomaría un carácter más salvaje y sangriento. Se pondría implacable como todas las guerras religiosas lo son. Se volvería una guerra de exterminio por parte de ambos bandos.
El Profesor Morse me ha contado sobre las conspiraciones iniciadas en la misma ciudad de Roma para destruir a esta República, El pueblo no sabe cómo los sacerdotes, las monjas, y los monjes que llegan diariamente a nuestras costas, bajo el pretexto de predicar su religión, de instruir personas en sus escuelas, cuidar de enfermos en sus hospitales, son nada más que emisarios del Papa, de Napoleón y de los otros déspotas de Europa, para socavar nuestras instituciones, para apartar los corazones de nuestro pueblo de nuestra constitución, y nuestras leyes, destruir nuestras escuelas, y preparar un reino de anarquía aquí como lo han hecho en Irlanda, en México, en España, y donde quiera que estén personas que quieran ser libres."